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El equipo de Cobot está orgulloso de mostrar la vibrante, diversa y excepcional escena del coworking en Latinoamérica. Acompáñanos en esta serie de artículos en los que conoceremos un poco más el carácter del coworking que se hace en el continente americano.
Coworking en México
Capital: Ciudad de México
Población (zona urbana): Ciudad 8,9M / Área Metropolitana 21M *
Número de espacios de coworking *: 62 En Ciudad de México / 100 en México *
Precio medio de la tarifa mensual de coworking *: $57 / mes (MXN 1.154 / mes)
“Yo quiero trabajar aquí”. Esta es la respuesta a la pregunta que nunca nadie le ha hecho a Jesús Grovas, Manager de Public Affairs en WeWork México: ¿Qué sentiste la primera vez que pisaste WeWork?
Jesús se incorporó el pasado mes de julio a WeWork pero durante toda la entrevista, cuando habla de la compañía, su filosofía y su dedicación, se nota que el espíritu de la empresa ha calado hondo en él. Este artículo se engloba dentro de la serie de entrevistas que estamos realizando para la próxima GCUC LATAM por lo que no sólo hemos tratado temas de WeWork sino que también hemos hablado del panorama del coworking en México.
WeWork opera a nivel global y eso le confiere un punto de vista único al valorar las similitudes y diferencias que hay entre los diferentes mercados de Latinoamérica. Jesús nos cuenta que WeWork opera actualmente en 83 ciudades y 24 países por lo que la solución que ofrecen como espacio responde a necesidades globales, no sólo de un mercado o de Latinoamérica en concreto.
Sin embargo, en varios aspectos, WeWork sí adapta los espacios a las necesidades culturales locales. “En el caso de Latinoamérica transmitimos al equipo de arquitectura la distinta manera de ver la vida que tenemos en estas latitudes: necesitamos una cocina donde calentar la comida, disponer de una zona donde podamos comer y socializar, ya que culturalmente preferimos comer platos calientes y hacerlo en grupo mientras que en Estados Unidos se opta por un sandwich frío en el mismo puesto de trabajo”. Por otro lado, añade, “los eventos también están tropicalizados, WeWork los adapta a los gustos y al carácter local de cada espacio”.
Otro aspecto en el que se trata de integrar la cultura local es mostrando su arte. Es muy satisfactorio ver como una compañía multinacional sigue incluyendo piezas de artistas locales en sus espacios, una de las características que ha acompañado al coworking desde sus primeros días, porque conviene no olvidar que WeWork fue fundada en 2010.
Su aproximación al coworking es muy similar a la de otros espacios: eliminar todas las cargas que implica trabajar en una oficina para que sus miembros se puedan concentrar en su trabajo. Conectarlos facilitándoles a establecer y potenciar relaciones que les ayuden a aumentar su volumen de negocio. Sin embargo, el alcance de WeWork, su dimensión global, su inmensa comunidad de más de 320.000 miembros, 15.000 de ellos en México, y la app que les permite interconectarse para ofrecer o solicitar servicios, sí constituye un factor diferencial derivado de su escala global. A día de hoy, Jesús nos cuenta “el 40% de los miembros dicen haber colaborado con otro de la comunidad”.
“Al conocer WeWork entendí porqué en mis trabajos anteriores los millennials no se adaptaban y cuál era el entorno que buscaban”. A partir de los gustos y las necesidades de esta generación se ha desarrollado una nueva manera de trabajar que sirve para todo el mundo y que en resumidas cuentas te inspira y te invita a crear. Y quizá esta sea la motivación de uno de los aspectos más curiosos de nuestra conversación: cómo WeWork verbaliza la filosofía que hay detrás del diseño de todos sus espacios, ya que nos hablaron de la voluntad de “generar un entorno que reduzca la distancia entre estar en el trabajo y estar en casa”. Aunque es cierto que, si nos paramos a pensar, todos los coworkings tratan de crear espacios que permitan a los miembros trabajar y relacionarse de manera distendida nadie usa el símil de hogar para describir las características o el espíritu de este diseño. Posiblemente, si eres alguien veterano en el coworking, aún recuerdas aquel mantra que veníamos usando hace ya años en el que convencíamos a las personas de que salieran de sus casas y vinieran a nuestros espacios a trabajar. ¿Esto es bueno?, ¿es malo? No tenemos la menor idea, pero si WeWork expresa abiertamente como argumento de venta que sus espacios pretenden reducir la distancia entre estar en casa y en el trabajo, muy en la línea con lo que multinacionales como Airbnb hacen en sus HQ, quizá deberíamos actualizar nuestros mantras o al menos ser conscientes de que deberían, tal vez, ser revisados ya que parece una manera bastante efectiva y directa de comunicar esta filosofía.
Algunos de los retos que supone vivir y trabajar en una urbe como Ciudad de México, por ejemplo, el tiempo de desplazamiento de casa al trabajo o entre reuniones, juegan a favor de WeWork ya que utiliza sus múltiples localizaciones en el DF como una solución a esos desplazamientos que te harían perder media mañana. Por otro lado, los distintos espacios disponen de diferentes características para responder al carácter del cliente de cada zona: “En la Colonia Juárez, una zona más hipster, los espacios son pet friendly y disponemos de parking para bicicletas y motocicletas. Mientras que en Santa Fe, una zona con un cliente de perfil más corporativo, disponemos de una mayor cantidad de plazas de parking para coches”.
Aunque gracias al trabajo que hicieron otros espacios antes de la entrada de WeWork en el mercado mexicano y al propio que llevan realizando desde que operan en el país, Jesús nos cuenta que aún queda mucho camino por recorrer: “Estamos muy sorprendidos con la respuesta que estamos teniendo. Todavía mucha gente no entiende qué es el coworking y mucho menos qué es WeWork”. No obstante, el coworking ha llegado a un punto en México que permite no solo ser considerado una solución apta para emprendedores o creadores, sino que empresas como el Banco Santander ubican sus departamentos de innovación en estos espacios.
“Una de las cosas que más me gusta hacer, es pasar por los distintos edificios de WeWork y hablar con el personal que acompaña en el día a día a los miembros. Me encanta que me cuenten historias de éxito”, explica sonriendo. Después, el equipo de Jesús se encarga de darles visibilidad y reflejar las exitosas historias que se forjan en WeWork. “Eso, también para obtener feedback de primera mano y corregir defectos o mejorar cualquier aspecto que no funcione” nos dice con una sonrisa esta vez un tanto más pícara.
“Una nueva forma de trabajar, innovadora que funciona bien y rompe barreras: la manera de trabajar del futuro” esa es la respuesta espontánea a la pregunta ¿Qué es el coworking para ti? de Jesús Grovas.
Nos gusta el buen coworking en todas sus formas y colores. Si visitas Ciudad de México y te apetece probar una versión tropicalizada de WeWork, pásate por su espacio en la Colonia Juárez, es sin duda una gran opción.
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